En la actualidad, estos dos términos se utilizan de la misma forma, y aunque su objetivo es igual, el canal es totalmente diferente.
Si estás diseñando tu estrategia para atraer clientes existentes y usuarios interesados de vuelta a tu sitio web, es posible que las estés comparando.
Tanto el remarketing como el retargeting son técnicas que ponen a los clientes potenciales y usuarios interesados de vuelta al embudo de ventas. En este blog te explicamos sus diferencias y por cuál optar para tu estrategia de marketing.
A continuación, te explicamos cada uno:
¿Qué es el retargeting?
El retargeting es el proceso que, por medio de anuncios pagos, se redirige a personas que ya fueron identificadas que han visitado tu página web o red social. Estos anuncios se entregan de acuerdo con el comportamiento o interacciones que tenga el usuario.
¿Has visto un producto en X página web y empiezas a ver anuncios en redes sociales o en otro sitio web, como si internet te persiguiera? Bueno, has experimentado el retargeting.
¿Cómo funciona?
Mediante un píxel que se agrega en el sitio web. Su función es capturar datos de forma anónima de las personas que te visitan y lo que hacen en el sitio (qué páginas revisa, cuánto se demora, en dónde da clic…)
Todas estas interacciones son rastreadas mediante un fragmento de código en su navegador llamado cookies. Cuando el usuario abandona tu página web, estas cookies lo seguirán por diferentes sitios web y motores de búsqueda, monitoreando sus acciones y recopilando datos.
Estos datos se utilizan para crear audiencias basadas en interacción, que luego son impactados con anuncios para que visiten de nuevo tu página y finalice la conversión.
Ejemplo
- Tienes una empresa de morrales y un usuario entra a la página de tu marca. Empieza a navegar, pero se va sin realizar ninguna acción
- Mientras está en Facebook e Instagram, ve anuncios de la marca mostrándole un morral que le encanta. En Google ve un anuncio con un cupón de descuento para ese morral. Ojo, este solo aparece a personas que han visitado la “empresa de morrales” y ha interactuado con ella.
- El descuento convence al usuario, quien finalmente compra el morral.
Con esto logras que el prospecto se convierta en cliente. Este es el objetivo del retargeting, mostrar publicidad a usuarios potenciales para que finalicen su compra.
Según un estudio realizado por ReTargeter, únicamente el 2% del tráfico web se convierte en la primera visita. La función del retargeting es atraer a ese 98% de usuarios que han mostrado interés en tu marca con anuncios, para que sea más probable la conversión.
¿Qué es el remarketing?
El remarketing es una técnica que busca reconectarse con clientes y atraerlos en función a sus compras o acciones anteriores mediante correo electrónico. En este, a diferencia del retargeting, es necesario tener una base de datos.
Esta técnica se utiliza como parte de una estrategia de retención más amplia y algunos ejemplos podrían ser:
- Recordar a tu cliente que no ha finalizado su compra y tiene algo en su carrito.
- Promocionar productos y/o servicios que complementen sus compras anteriores.
- Ofertas a productos relacionados con compras anteriores.
- Cupones o códigos de descuento para atraer a clientes antiguos y que no han adquirido nada en semanas o meses.
Al igual que el retargeting, el remarketing es una forma efectiva de convertir. De acuerdo con Campaign Monitor, “las campañas de correo electrónico segmentadas generan hasta un 760% de aumento en los ingresos”.
Ahora, siendo que son técnicas diferentes, ¿Por qué existe tal confusión con estos dos términos? La plataforma publicitaria Google Ads sugiere una ampliación del término REMARKETING para encerrar ambas técnicas.
¿Por qué es importante esta distinción?
Si bien, la línea entre los dos es muy pequeña, es importante que sepas cuándo, por qué y cómo utilizar cada una. Esto te ayudará a lograr tus objetivos de manera más efectiva.
Entonces, ¿Cuál elijo en mi estrategia?
Depende de los objetivos que tengas y el target al que quieres llegar:
- Haz retargeting si buscas atraer nuevos clientes, no tienes una lista de correo electrónico de prospectos interesados o estás generando mucho tráfico al sitio web, pero sin conversiones.
- Haz remarketing si quieres volver a atraer clientes pasados o ya tienes una base de datos segmentada de clientes y prospectos interesados.
Nuestra recomendación es que uses ambas al mismo tiempo, así podrás maximizar tus resultados y atraer aún más prospectos y clientes a tu embudo de ventas.
Si bien, estas técnicas parecen fáciles de ejecutar, una mala gestión puede hacer que tu estrategia se vaya al piso. Pues hay muchas personas que consideran estas técnicas como algo intrusivo e invasivo, y pierden el interés en tu marca. Ahí es donde entramos nosotros. En PLUG queremos ser el aliado que te permitirá incrementar tu tasa de conversión ¡Escríbenos! Te ayudamos a alinear tus objetivos, estrategia y presupuesto, para maximizar tus resultados.